El proyecto de la construcción de la muralla de Ibiza aprovechó las ya existentes desde la antigüedad, ampliándolas y rodeándolas. Una de las grandes diferencias con las murallas de la época es que cuenta con siete baluartes(construcciones con punta de flecha) a diferentes alturas, unidos por lienzos de murallas y dotados de casamatas(refugios interiores para la artillería).
Atravesando esta entrada que vemos en la foto, Portal de Se Taules, se accede a la plaza de armas (finales del Siglo XVI) compuesta por un soportal con diez arcos de medio punto, que alberga una gran chimenea donde se situaba el cuerpo de guardia. Aquí se hizo el primer mercadillo hippie de la isla.
Uno de los siete baluartes es el de Santa Llúcia, donde estuvo el antiguo polvorín. En el año 1730 ocurrió un trágico suceso. Un rayo hizo detonar 370quintales de pólvora, matando a 15 personas y provocando numerosos daños materiales en los edificios de la zona. Desde entonces, ese año es conocido como «El año del trueno»