Situado en la Avenida del Paralelo de Barcelona, ha sido uno de los cafés-conciertos más conocidos y transgresores de Europa del S.XX y XXI. Abrió sus puertas en 1898 con el nombre Pajarera Catalana, concebido como un espacio para espectáculos. En 1910 cambió el nombre por el de Petit Moulin Rouge y con la llegada de la dictadura franquista (1939) el régimen obligó a castellanizar el nombre y suprimir la palabra «rojo». Desde entonces ha quedado como El Molino.
Después de la reforma finalizada en 2010 por la empresa Ocio Puro, el molino continúa siendo una sala de music-hall, con espectáculos que se pueden ver con una copa o una cena preparada por un chef de renombre. Se hacen espectáculos de música, teatro o flamenco, pero destaca especialmente por los de revista, cabaret burlesque y music-hall.