Amaiur es uno de los pueblos más bonitos de Baztán, una auténtica joya arquitectónica, con un núcleo urbano muy bonito, delimitado por un impresionante arco de entrada y las ruinas del último castillo de Navarra en caer en manos del Reino de Castilla.
Ubicado a unos 280 metros del nivel del mar y con una población de 300 personas, volvió a formar parte del Baztán en el año 1969, tras 304 años de haber estado independizado de él.
El pueblo
La iglesia, el castillo, el molino y el núcleo urbano son los atractivos de este pequeño pueblo.
Núcleo urbano
Pequeño y sobre una única calle, que forma parte del Camino de Santiago, tras pasar el arco de entrada, encontraremos casas típicas de esta zona de Navarra, o una fuente que emana agua para saciar la sed de los peregrinos a su paso por el pueblo.
El pueblo se puede visitar en mediodía, a no ser que se quiera hacer una visita guiada, para lo que tendréis que ir hasta el molino, donde Felipe e Isa os atenderán e informarán encantados.
El Castillo
Ubicado en la zona más alta de Amaiur, el monte Gaztelu, a 1,5 kms del molino, nos ofrece unas vistas panorámicas increíbles del pueblo y de los alrededores.
Hace más de 500 años el castillo de Amaiur se convirtió en protagonista de un acontecimiento muy importante de la historia.
Fue el último bastión de resistencia del Reino de Navarra frente al de Castilla antes de incorporarse a éste.
200 hombres contra 10.000.
En 1522 quedó totalmente destruído.
Hoy en día solo quedan los restos del castillo, en el que un monolito y una inscripción recuerdan a los héroes de aquella batalla.
Se pueden visitar los restos que están bien señalizados y delimitados.
El Molino de Amaiur
El molino de Amaiur se encuentra en el principio del pueblo, antes del arco que da paso al núcleo urbano, a mano izquierda frente a la iglesia.
Se trata de un molino de agua del Siglo XVIII, edificación tradicional del norte de Navarra que se ha rehabilitado y se ha convertido en uno de los grandes atractivos de Amaiur y Baztán.
Felipe e Isa ofrecen visitas guiadas, talleres infantiles y claro, harina producida en el propio molino.
Otra de las cosas que ofrece el molino son los talos, unas tortas tradicionales de harina de maíz que se pueden comer con diferentes ingredientes.
Si nunca los habéis probado os recomendamos que os acerquéis a Amaiur a comeros uno.
Hoy en día el molino se ha convertido en uno de los lugares más importantes de Baztan Bidasoa en gastronomía y espacio de exposición.
La iglesia
La iglesia de la Asunción de Amaiur fue un templo de época medieval que en la segunda mitad del Siglo XVI sufrió una importante reforma.
Ésta no se ha conservado ya que fue reemplazada por la ampliación que sufrió el edificio en el Siglo XVIII.
El templo presenta una planta en cruz latina, con cabecera recta, crucero y sacristía de estilo barroco.
Estrecha y alta nave renacentista en tres tramos separados por arcos moldeados apuntados que apean en ménsulas, disponiéndose a los pies un coro alto del Siglo XVIII.
Ver más iglesias de Baztán aquí.
El pueblo de Amaiur ha decidido abrir un museo para recordar su historia. Se trata de un pequeño espacio en el que se pueden encontrar objetos que forman parte de la historia del pueblo.
Nuestra visita
Llegamos en coche desde Elizondo por la N-121-B. Dejamos el coche en la propia entrada del pueblo, frente al molino.
La visita de éste la dejamos para el final, así que tiramos hacia el castillo, cruzando primero el arco de entrada al núcleo urbano. Cabe decir que el camino es en constante ascensión, si bien en este tramo no es muy pendiente.
Nos paramos a probar la fuente de agua para los peregrinos, y nos hicimos diferentes fotos.
Si bien se puede acceder en coche hasta los pies del monte Gaztelu, a pie es como realmente se puede disfrutar del pueblo.
Cuando llegas a los pies del monte, el resto del camino hasta el castillo es sobre tierra. Éste va ascendiendo rodeándolo y pudiendo verlo en todo momento.
Una vez arriba se puede comprobar que ha sido rehabilitado, arreglando el acceso, que se hace atravesando un torno. Se han puesto unas plataformas de metal para que puedas acceder hasta el monolito, y en donde encontrarás una serie de paneles explicativos.
El monolito, imponente, cuenta con una inscripción en la que se recuerdan a los héroes que lucharon en la última batalla del Reino de Navarra.
Además de la transcendencia del lugar y de la historia que guarda, te ofrece unas vistas preciosas de Amaiur y su entorno. La verdad es que el lugar es precioso.
Estuvimos un buen rato, leyendo los paneles de información, haciendo fotos, grabando vídeos, disfrutando del lugar.
Si queréis conocer más rutas de Baztán podéis encontrarlas aquí.
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